Ya hemos hablado un poco sobre los espacios que hay que considerar al adquirir una nueva vivienda, tips para el diseño de interiores y el proceso para obtener el financiamiento de nuestra vivienda. Una vez llega el momento de mudarnos a nuestro nuevo hogar, estamos tan emocionados, que pocas veces nos tomamos el tiempo para pensar de que manera mantenerlo “como nuevo”.
En este post abordaremos algunos temas sobre el mantenimiento básico que debemos darle a nuestra casa, y que nos permitan disfrutarla y lucirla ante nuestros familiares y amigos, para siempre causar impresiones como: “tu casa esta como nueva, ¿cómo lo haces?”
Como todo en la vida es mejor programar las actividades para no encontrarse con imprevistos, nuestra vivienda no es la excepción. Si nosotros programamos mantenimientos periódicos en nuestra casa, nos podemos evitar disgustos que pueden llegar a ser costosos, cuando de ser atendidos en el momento oportuno no representa mayor inversión.
A continuación les daremos siete consejos básicos para el cuidado y mantenimiento de tu hogar:
A parte de las paredes, el techo es una de nuestras principales barreras de protección contra el exterior. Al estar expuesto continuamente al sol, lluvia y al polvo, es claro pensar que debemos tener especial cuidado al mantenimiento de este elemento. Algo tan simple como hojas, sedimento de polvo o incluso los nidos de pájaros pueden provocar un desagradable momento. Para evitar las no deseadas goteras y/o las humedades en nuestra vivienda, debemos programar una revisión completa del techo cada seis meses, o por lo menos al inicio de la estación lluviosa. La revisión debe incluir: limpieza de canales, cambio de tejas quebradas y revisión de botaguas. Al mismo tiempo se deben revisar y limpiar todas las cajas de aguas lluvias, para evitar obstrucciones que empoce el agua.
Las ventanas aparte de ser funcionales también mejoran la estética de nuestra vivienda, pero, ¿Qué pasa si nos olvidamos de ellas? Claro, muchos dirán: “yo no me olvido de las ventanas, las limpio casi todos los días”. Eso es excelente, sin embargo, no es suficiente. Programar una revisión anual (preferiblemente al inicio de la estación lluviosa) del silicón de sellado de las ventanas, y dos veces al año la revisión de las mallas de las ventanas, nos garantiza que no tendremos filtraciones de agua, ni agujeros en las mallas que den acceso a zancudos u otros insectos que nos pueden enfermar.
Las puertas de acceso y la de los diferentes muebles de nuestra casa están en constante uso, creando así un desgaste natural en los materiales y aumentando la frecuencia con que debemos revisarlos. Se aconseja que cada tres meses se revise el correcto funcionamiento de: bisagras, rieles, chapas, recibidores y cerradura. A parte de verificar la integridad misma de la puerta.
En estas épocas de fiestas quien no desea invitar familiares y amistades a su hogar, y dejarlos impresionados por el aspecto de nuestra vivienda. Pues bien, para lograr esto no debemos olvidar que la pintura es lo que cubre la mayor parte de la vivienda, y si esta está en perfectas condiciones nuestra casa también se verá de igual forma. La recomendación para este apartado varía dependiendo cada caso, por ejemplo, una pareja con niños va a necesitar retocar las paredes con mayor frecuencia, que una con hijos mayores. Ahora bien, lo que podemos asegurar es que al darle mantenimiento a la pintura de nuestra fachada al menos una vez al año, aseguramos que siempre deslumbre igual que el primer día que nos mudamos.
Seamos honestos, ¿Cada cuanto nos recordamos de la bomba hidráulica de nuestra vivienda? Posiblemente solo cuando esta falla. Una revisión rápida del sistema de bombeo cada seis meses puede representar un gran ahorro a largo plazo. Por ejemplo, no es lo mismo cambiar un pequeño accesorio que presente una fuga, a cambiar la bomba completa porque esta se recalentó, por no hacer el cambio del accesorio a tiempo. También es recomendable realizar una limpieza de la cisterna de la vivienda cada seis meses, para eliminar los sedimentos que trae el agua potable que se nos provee.
Muchas veces nos quejamos que el agua de las duchas y lavamanos no sale con suficiente presión, y comenzamos a acordarnos de la empresa que suple el sistema de agua potable o del equipo de bombeo de la Cisterna. Pero, como mencionamos en el apartado anterior, el agua potable que nos proveen siempre trae partículas de piedra, cal, sedimentos y demás restos de suciedad. Todos estos elementos quedan atrapados en los filtros de cada uno de nuestros grifos; con el pasar de los meses los filtros se llenan de partículas y disminuyen el flujo de agua. Para solucionar esta situación se aconseja realizar una revisión cada cuatro meses de todos los grifos. La cual consiste en desmontar el filtro del grifo, y limpiarlo con un cepillo viejo o un alfiler hasta remover toda la suciedad.
El jardín de una vivienda dice mucho de su dueño, por ello no debemos descuidarlo. Los motivos para dar mantenimiento a las áreas verdes de la vivienda van más allá de lo estético, ya que, un jardín descuidado puede ser el hábitat perfecto para insectos que pueden enfermarnos de gravedad. Por ello se recomienda recortar la grama y eliminar las malezas cada tres semanas, y abonar la grama y el jardín al menos una vez cada tres meses.
Recuerda que puedes solicitar apoyo con el mantenimiento de tu vivienda al equipo de AIGM. Tenemos un equipo exclusivo y especializado para todo este tipo de actividades.
Residencial El Sauce |
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